La telefonía móvil y la movilidad en la Sociedad de la Información

El año 2004 ha sido un año muy especial en cuanto a noticias relativas al móvil. Tal vez lo más recordado será su papel protagonista en los días que siguieron al fatídico 11 M. El móvil en esos días tuvo diversos papeles: desde el dramatismo de los móviles de los fallecidos sonando entre los trenes destruidos hasta el incremento del 700% del número de intentos de llamadas en esas primeras horas, mostrándolo como elemento de comunicación de primer orden para disminuir la angustia de esos momentos; el móvil apareció también, a su pesar, como herramienta de los terroristas para detonar los explosivos pero, afortunadamente también como camino para capturarlos en pocas horas y finalmente en su irrupción como un novedoso medio de movilización de masas con el famoso “pásalo” que ha convertido al móvil desde entonces en objeto de estudio de los sociólogos de todo el mundo al romper el mito de que sólo los medios de comunicación de masas como la TV podían hacer eso...

Desde el punto de vista de la construcción de la Sociedad de la Información y del futuro del sector hay dos noticias en España que destacan sobre las demás en el sector móvil. La primera es, sin duda, la del lanzamiento comercial del UMTS y la segunda es el principio del proceso de resolución del problema del despliegue de antenas.

Respecto al UMTS lo que podemos decir es que ya está aquí, ya se pueden comprar los terminales en las tiendas y hay cobertura en las calles. Comenzaron siendo ofertas de tarjetas PCMCIA para portátiles y se ha convertido en una incipiente oferta de terminales algunos ya muy cercanos al terminal tipo de GSM al que estamos acostumbrados. El UMTS va a ser desde ahora una pieza más de nuestro paisaje tecnológico y el tiempo nos irá presentando sus nuevos servicios. Por el momento el más sorprendente es, sin duda la videollamada. Hace 40 años fue presentada como servicio futurista en la Feria Mundial de Nueva York pero tras varios intentos fallidos nunca llegó a ocupar el puesto protagonista que las películas de ciencia ficción le otorgaban. Ahora le toca el turno de intentarlo a la telefonía móvil. El ritmo de renovación de terminales que hay en el sector (18 a 24 meses) hará que en pocos años la mayor parte de los clientes móviles tengan terminales con la capacidad de llamar con voz e imagen y esto se creará un efecto, el de economías de red, esencial para que un servicio de comunicación tenga cada vez más valor para un cliente.

El otro gran tema es el despliegue de antenas de la nueva infraestructura móvil que precisa este país. España es en este momento el peor país de Europa para realizar este despliegue, con más dispersión normativa y más dificultades de todo tipo. La buena noticia de este año 2004 es que todos los partidos políticos y todas las administraciones (central, autonómica y local) están de acuerdo en cambiar esta situación. Fruto de esta voluntad común ha sido la creación del CSDIR, un comité para impulsar el desarrollo de las infraestructuras de radio que agrupa a las tres administraciones y al colegio de ingenieros y AETIC. Los resultados de sus trabajos serán un acuerdo para la tramitación de licencias en menos tiempo y el desbloqueo de esta situación que tanto perjudica a los objetivos económicos de productividad que se ha marcado el país.

El año 2004 también nos ha brindado la extensión del acceso al correo electrónico por el móvil con la ya famosa Blackberry y en general de todo tipo de servicios para “movilizar” los procesos de negocio de las empresas que influyen de modo directo en su productividad y liderazgo.

En suma el 2004 ha sido un año que ha sentado las bases sólidas de lo que será el futuro de la Sociedad de la Información en España y de una de sus líneas de desarrollo esenciales: la telefonía móvil.

San Judas Tadeo